Se cree que el concepto se originó en Japón antes de los Juegos Olímpicos de 1964.

Los podómetros se convirtieron en la sensación de un país contagiado por la fiebre olímpica y una compañía lanzó un dispositivo llamado manpo-kei, que significa la medida de los 10,000 pasos.

«Fue un lema de negocios, como el ‘Just do it’ de Nike, y que resonó entre la población»,comenta Tudor-Locke profesora asociada del Centro de investigación Biomédico Pennington de la Universidad Estatal de Luisiana

Desde entonces esa marca se ha convertido en el objetivo estándar de la actividad física alrededor del mundo.

El ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón recomienda caminar diariamente entre 8,000 y 10,000 pasos mientras que, en Reino Unido, el Foro de Obesidad Nacional dice que una persona que camina entre 7,000 y 10,000 es moderadamente activa.

No es tan simple

La experta en preparación física Laura Williams considera que el impacto que ha tenido la teoría de los 10,000 pasos se debe a que se trata de un número redondo.

Williams añade que al referirse a actividades como caminar y pasos resulta más viable para muchas personas que consideran que 150 minutos de ejercicio a la semana (lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud)es mucho.

Pero la realidad no todos los pasos son iguales ya que hay diferencia «si tienes piernas cortas o largas» como lo explicó Dale Esliger, catedrático en la medición de actividades física de la Universidad de Loughborough.

Además agrega la interrogante que una pulsera que mide la actividad de las piernas deja margen de error ya que de esos 10,000 pasos «tal vez se incluyan movimientos como agacharte para atarte los cordones de los zapatos», dijo Esliger.

«El mejor dispositivo para seguir los pasos debería ser uno que esté ubicado en el tobillo, para que registre un paso biomecánicamente».

Una persona camina en promedio entre 3,000 y 4,000 pasos al día, menos de la mitad del objetivo establecido en los dispositivos, según el Servicio de Salud en Reino Unido.

Objetivo viable

Williams considera que para alcanzar esa meta las personas deberán crear una estructura que impulse el caminar en su rutina diaria.

También recomienda exigirse aumentando el ritmo y la intensidad de los pasos para aumentar los beneficios.

Tudor-Locke está de acuerdo que los 10,000 pasos es un objetivo loable:

«Hazlo si quieres hacerlo, sube a 12,000 ó 14,000 pasos. No hay un límite que sepamos será contraproducente a tu salud».

Pero advierte que no debería convertirse en una obsesión. «Más que un número, lo que es más importante es no ser sedentario».

Si un podómetro te motiva para que te mantengas en movimiento síguelo utilizando, solo te recomiendo que te exijas más una vez que tu meta de 10,000 pasos sea fácil de cumplir.

Fuente: www.bbc.com