Deshazte del peso ganado en estas fiestas
Si sientes que durante estas fiestas comiste demasiado y ahora tienes peso extra, es hora de que lo elimines.
En estas fechas es muy común que nos extralimitemos en cuanto a comida se refiere. Es imposible decirle no a esos romeritos, al pozole, el bacalao, lomo pierna, pavo, etc., ¡todo está tan delicioso! Además que el ambiente se presta, la paz, armonía y la convivencia familiar hacen que nos dejamos llevar por esa sinfonía de sabores.
Desafortunadamente, las fiestas no duran para siempre, así que cuando todo vuelve a la normalidad te das cuenta que la báscula no perdona. Se cree que en estas fechas el promedio de peso ganado ¡es de 7 kilos!
No te preocupes, con constancia, perseverancia y dedicación podrás llegar a tu peso. Hoy te daré cinco maneras de lograrlo.
1. Haz una lista
No se trata de los propósitos que hiciste al comer las uvas. La mayoría de esos propósitos terminan siendo los mismos el siguiente año puesto que renuncian a ella el mismo mes o incluso al día siguiente de haberlos hecho.
Este es un simple ejercicio de fijación de objetivos que te ayudará a establecer tus prioridades y te dará una ruta clara de hacia donde quieres llegar.
Para comenzar, haz una lista de objetivos de pérdida de peso simples, específicos, realistas pero sobre todo, factibles. Estos deben ser los objetivos que pertenecen al proceso, como permanecer en tu plan de comidas, completar tu entrenamiento diario y terminar tu sesión de cardio durante el día.
Puedes establecer un objetivo semanal, o incluso, objetivos diarios. La clave es mantenerlos pequeños y convertirlos en algo que definitivamente puedas lograr.
2. aumenta la intensidad
Aumentar la intensidad en tus entrenamientos ayudará a acelerar tu metabolismo y a entrar en el modo de quemar grasa.
Intenta aumentar el tiempo total de tu sesión de ejercicio. Este tipo de objetivo funciona bien cuando se realiza entrenamiento cardiovascular . Trata de quedarte en la caminadora un minuto extra.
Otra forma de establecer metas para ti en tus entrenamientos es que podrías intentar intensificar un poco tu trabajo. Este tipo de objetivo funciona bien con las sesiones de entrenamiento con pesas.
Muchas personas usan algún tipo de monitor cuando están entrenando, lo que les proporciona las estadísticas para su entrenamiento, como la frecuencia cardíaca. Esforzarte por aumentar tu frecuencia cardíaca un par de puntos más es un gran objetivo para el día.
3. Pierde peso gradualmente
No intentes perder todo el peso ganado en solo un par de sesiones. Terminarás exhausto y probablemente dejarás el programa de entrenamiento sin haber logrado tu objetivo.
Determina cuánto peso necesitas perder y luego complementa una rutina de acuerdo a tu edad, peso actual, tu construcción y tu estado de salud general actual. Para estar seguro, estas estadísticas deben estar dentro del rango de peso recomendado por un especialista.
La clave es desafiarse a sí mismo a perder peso poco a poco.
Puedes esperar perder de medio kilo a un kilo durante la primera semana, ya que probablemente perderás un poco de peso del agua junto con la grasa del vientre .
4. Controla tu progreso
Llevar un registro de todo lo que haces es una de las mejores maneras de mantenerte motivado y responsable.
Comienza a rastrear qué y cuánto comes a diario, qué ejercicios hiciste durante tu entrenamiento y cuánto duró tu sesión de cardio.
Ver cómo progresas en tu viaje para alcanzar tu meta de pérdida de peso no tiene precio. Esto te ayudará a seguir con tu programa y descubrir muchas otras cosas pequeñas que podrías cambiar y mejorar.
El seguimiento de tu progreso también se relaciona con la fijación de objetivos. Después de varias semanas de logros, puedes disfrutar de algo como un día en el spa o algún otro tipo de recompensa no alimenticia.
5. Haz sustituciones saludables
Como se menciona en la primera sección de este artículo sobre cómo hacer una lista, establece pequeños objetivos cuando trates tus hábitos alimenticios.
Establecer la barra en un nivel imposible es prepararse para el fracaso, así que esfuérzate por hacer pequeños cambios en tus hábitos alimenticios diarios que progresarán a lo largo del tiempo.
En lugar de hacer una declaración de que ya no comerás nada dulce a partir de ahora, comienza por comer menos de esas cosas o sustituir alternativas más saludables por los dulces llenos de azúcar a los que estás acostumbrado.
Ten en cuenta que morir de hambre no va a funcionar tampoco; la clave para perder peso no es la privación sino la moderación.
Del mismo modo, tomar decisiones más saludables también afectará tu objetivo de mejorar tu salud general también.
Un gran ejemplo de una sustitución saludable es en lugar de tener un tazón de helado con una cobertura de fruta, ¿por qué no tener un tazón pequeño de frutas con una pequeña bola de helado como cobertura?
Limitar tus comidas favoritas a un par de días por semana es una excelente manera de garantizar su éxito.
Como siempre digo, no se trata de hacer cambios drásticos sino de ir paulatinamente. Es mejor ir de a poco que intentar acelerar el proceso y correr el riesgo de no cumplirlo. Espero que estos consejos te sirvan pero sobre todo, espero que los pongas en práctica.
Información: geoleaders.com