Dime qué te duele y te diré qué sientes
Nuestro cuerpo nos habla todo el tiempo y nos invita a escucharlo y entender las razones por las que a veces estamos fuera de equilibrio y esto muchas veces, no se debe solamente a causas físicas, sino al desbalance en nuestras emociones.
Cada tipo de dolor, nos habla de una emoción distinta y nos alerta de una u otra cosa, por eso es muy importante saber reconocer que la respuesta al dolor, muchas veces está en tu interior, solo debes escuchar a tu cuerpo, observar tu vida y analizar tus emociones.
Hoy te quiero compartir una breve guía sobre algunas manifestaciones del cuerpo vinculadas a las emociones:
Molestias en la garganta: hay cosas que tienes que decir, pero que has reprimido
Dolores de cabeza: pueden ser resultado de preocupaciones y dudas
Corazón: el estrés es una de las principales causas de este padecimiento
Gripe y enfermedad en los pulmones: Existe algo en tu vida que te disgusta y así liberas el cansancio ante ese problema, también puede estar causada por la tristeza
Dolor en los tobillos: Representa las resistencias que tienes en tu vida
Molestias estomacales: angustia, dificultad para convivir y digerir las situaciones
Páncreas: en esta parte del cuerpo se acumula la frustración
Riñones: te estás enfrentando a situaciones que te provocan miedo
Problemas en el hígado: revisa qué tanto te enojas
Problemas de espalda: Falta de apoyo o cargar con cosas que no te corresponden
Dolor en los muslos: Te preocupa lo que los demás esperan de ti
¿Has presentado alguno de estos padecimientos ante una de las emociones con las que se vinculan?
Date un respiro y permítete recuperar la armonía, volver a encontrar el camino en el que tus emociones y tu cuerpo se encuentran sanos y felices.