Existen trillones de microbios que viven dentro de nuestros cuerpos, la mayoría en el intestino, estos ayudan con la digestión, ciertos nutrientes y liberan sustancias que tienen efectos en la salud.
El cerebro está programado para desear alimentos que combinen grasas e hidratos de carbono, como la comida rápida, porque generan una señal de recompensa.